lunes, 30 de mayo de 2011

¿Qué camino elegir?


Todo empezó a cambiar, mi alma ya no aguanta más, mi corazón esta destruido y mi cabeza paranoica.
Se que no hago las cosas bien, que no soy perfecta y que incluso no me caracterizaría como una gran persona,  pero, también se que debo cargar con mis errores, con mis defectos, con mi hermoso pasado y con las ganas de llorar.
No pido mucho, solo comprensión, ¿acaso es mucho?, si lo es, lo lamento tanto, pero de verdad lo necesito.
Estoy en un abismo emocional, donde la felicidad no tiene lugar, harta de fingir sonrisas, de esconder lagrimas, de gritar sin razón, de que mi alma no pare de quejarse, de seguir en este estado de letargo de ser un cero, ya ni se que pensar.
No entiendo, algunos me dicen que debo seguir adelante, que las cosas me están saliendo bien y otros que debo volver a ser la misma de antes.
Y me pregunto: ¿con quién me siento bien?, ¿qué debo hacer?, ¿Cómo hago para soportarlo todo?, ¿reacciono de una vez?, ¿rectifico la situación?
Todo cambia de color, la confusión y el dolor reinan mi corazón roto.
No puedo dejar de pensar en este dolor que me esta matando,  de las lagrimas que estoy guardando, no puedo más, ya no se como hacer para seguir caminando en este  abismo, no se de donde sacar fuerzas.
Ya nada me puede ayudar, sola lo tengo que superar, pero, ya ni se que hacer, gritando en silencio no soluciono nada, en este maldito estado de letargo no soluciono nada, pero ya ni se que hacer.
Me paro a preguntarme: ¿soy una buena persona?, ¿me merezco esto?,  ¿Qué hago para seguir andando?, ¿quién me puede dar una mano?, ¿para qué lado de la cuerda tirar?, ¿para qué existió ese momento en el cual arruiné todo?, ¿de dónde saco mis ganas de vivir?, ¿Dónde las deje?
Me he cansado de ver falsas sonrisas, de recibir falsos abrazos, de ver miradas que no me dicen nada, del egoísmo de todos, de hacer todo al revés, de vivir entre palabras, de no poder caminar sin pensar en todo eso que me hace mal.
Se muy bien que me debo quedar de un lado de la cuerda, en el medio caigo. ¿Por qué no se puede estar bien con los dos opuestos?
Quiero que se pinte de una vez esa sonrisa mía que se fue y ya ni se donde la deje, ni cuando lo hice, ¿volverá?
Mientras la espero hablaré con mi compañero incondicional el papel, mediante mi lápiz,  ellos siempre me comprenden, no curan mis heridas, pero me ayudan. Y también con cuidado elijo en quien confiar, a quien querer y a quien entregarle mi verdadera amistad.
“Un tropezón no es caída” me dijeron una vez, y se que tiene razón, lentamente me levanto e intento seguir andando.
Despacio, viviendo mis penas en pleno silencio, me levanto con la frente en alto y sigo caminando muy despacio buscando las respuestas a las muchas preguntas de mi cabeza.

jueves, 21 de abril de 2011

Amigos...*

Entre decepción y decepción, me puse a pensar de una vez, no existen los verdaderos amigos, ni los falsos amigos; existen los amigos, esos que con orgullo reconoces como un hermano y los compañeros de jodas o simplemente compañeros con los cuales te identificas un poco más que con los demás.
¡Qué feo es caer en esa maldita realidad!
Quiero agradecerle a Dios por mis amigos, esos que con honor y alegría los presento como parte de mi familia, esos que nunca me fallaron, esos que  me escuchan siempre, que me retan si es necesario, esos que me abrazan y también insultan, esos que están en todas, esos que hacen muchísimas cosas por mi, esos con los que pienso en voz alta, esos que me cuentan todo, esos que de verdad merecen mis lagrimas, esos que me valoran de verdad, esos que me sermonean siempre, esos que de verdad me quieren ayudar, esos que valen oro y plata, los amo.
A quienes llamaba amigos también les quiero agradecer, por escucharme, por hacerme reír, por acompañarme, por mostrarme quienes eran mis AMIGOS, por todo en realidad, aunque las cosas no salieron como pensamos, muchas gracias por haberse cruzado en mi camino, porque me hicieron ser más fuerte, porque haberlos tenido en mi vida fue y es hermoso por más de todo lo malo, me quedó con los buenos momentos. Podría caminar mucho más junto a ustedes como mis compañeros. ¡Los quiero mucho!
Voy a seguir un ejemplo de un amigo que admiro mucho y voy a seguir adelante después de todo, y al mal tiempo, buena cara.
Junto a mis amigos que siempre me ayudan a levantarme, caminaré los largos y confusos caminos de la vida.
Me despido con una frase de Porta: “colegas muchos, pero amigos quedan pocos”.
Sin más…

miércoles, 13 de abril de 2011

Errores...

"Harta y cansada" de ver ésta máldita realidad, "tal vez las cosas no suceden como yo pensé", ¿en qué mundo estaba cuando pensé que por fin todo estaría bien?, por que; "cuando piensas que todo tienes en mano, por la espalda te señalan los que ayer llamaste hermano".
"Estoy cansada de todo ya es tan indiferente que no hay ganas de llorar, de gritar"; quiero cambiar mi manera de hablar "son páginas en blanco, quiero irme a otro capitulo".
"Sigo buscando amigos, alma y corazón", tengo que hacerme fuerte y dejar de confiar o por lo menos "consultar al corazón lo que podría pasar", la traición rebota en mi cabeza, "late mi corazón para transmitirme sus quejas",. tales que mi alma quiere escapar "por una calle solitaria, todo está oscuro y llueve, las farolas me observan y el paso del tiempo me duele".
¿Cúando voy a aprender a cuidar mis palabras? El tiempo no se puede volver a atrás, me dice mi conciencia.
Mi frase de vida algún día será "tal vez te asombra que no crea ni en mi sobra", ésta situación me arrastra a ese camino, gritando en silencio, pensando en "que no existe esa persona para compartir".
Muchas veces me he caído, y me he levantado, ahora me levanto y dejo el paso atrás, para dejar una enseñanza más, y tener un futuro con otra realidad.




-               Alddi!



# Porta
# Callejeros

sábado, 26 de marzo de 2011

Introducción "Enganchado al boli y al papel, corazón escribiendo"

Crucé el pequeño bosque, y entre las ramas encontré eso que tanto esperaba ver, seguí caminando hacia el norte, y allí estaba el escenario perfecto, el sol caía y el mar mostraba las sus mejores olas, por lástima el paisaje precioso no me transmitía más que una paz irónica.
Me senté en la blanca arena a observar el horizonte, la tomé con el puño y la dejaba que se escapase por mis dedos, veía como chocaban las olas con las rocas y como se desgastaban estas.
Reflexioné sobre mi extraña vida; mi bipolaridad, mis rarazas que ni yo entiendo, las lagrimas sin razón, las traiciones, mi amor, los recuerdos que nunca viví, el lugar al cual nunca fui, las historias que escribí, las miradas de las personas que amo, los malos actos, lo que llamamos Dios, la hipocresía diaria, las guerras continuas, las mentiras, las verdades, las risas, los amigos verdaderos, y los falsos, los buenos momentos, la familia, y podría seguir nombrando infinidades de cosas en las cuales reflexioné…pero, ¿para qué nombrarlas todas, si las puedo contar?
Recordando los buenos momentos una sonrisa enorme se me escapó, el mar me invita a soñar y a olvidar de todo lo que me hace mal, la arena se me fue entre los dedos nuevamente…
Recordando lo que nunca viví, llegué a confusiones y conclusiones de las cuales no es divertido hablar, para otra ocasión será.
Pensando en mis errores, de ira me llené, por desaprovechar momentos perfectos, por haber hablado de más, por dar lo que no tengo, por los gritos que no di, por las sonrisas que mostré, por los abrazos y besos que no di, por tantas equivocaciones tontas; pero pronto aprenderé a no pensar que soy un gran error.
Razonando mis cambios de humor, sonreí, tengo que tomarlo por humor, porque mis lágrimas podrían ahogar el mar, prefiero reír que llorar por esto.
Acostándome en la hermosa arena, sonreí por mi familia que son mi impulso a seguir, y por mis verdaderos amigos los que me escuchan siempre, que me entienden, los que me regalan una sonrisa, con los cuales pasé buenos y malos momentos, por los que conocen mucho sobre mi y aun así siguen conmigo, a ustedes les digo gracias y  les regalo miles de sonrisas y apoyos.
En cuanto a amor, tengo tanto para decir… solo una vez lo sentí y lo siento, soy muy feliz teniéndote a mi lado, te digo gracias por hacerme sonreír, te adoro con todo mi corazón, sos lo mejor, y espero que sigamos caminando juntos este camino por muchísimo tiempo más.
Y para todos aquellos que me traicionaron alguna vez, no guardo rencor, tan solo una molestia en el corazón, pero les digo gracias porque así voy a aprender a hablar de menos, espero que no te moleste mi reacción.
Llena de preguntas, contradicciones, locuras, rarezas, momentos, personas, alegrías, penas, presentimientos, sonrío por lo bueno y por lo malo que se va a esfumar algún día.
Tengo mucho más por plantear, pero… guardo el bolígrafo, el papel y preparo el corazón y la mente para otra ocasión.